17 Ago Protege sus ojos del sol

Los niños tienen la piel sensible, pero también los ojos, que sufren especialmente por la exposición al sol, por eso es recomendable su cuidado y protección con el fin de evitar futuros problemas.

Los rayos ultravioleta pueden tener efectos muy desagradables como dolores de cabeza, conjuntivitis, queratitis… y a largo plazo, cataratas. los síntomas se manifiestan con la sensación de arenilla en los ojos, fatiga, ojos llorosos, enrojecimiento y fotofobia. En este caso, la prevención es la mejor arma: gorras con visera y gafas de sol.

Estas últimas son imprescindibles del caso de que el niño tenga los ojos claros, aunque es mejor que no las utilice de manera continuada, sino sólo en horas de fuerte insolación.

Pero hay que tener especial cuidado porque no todas las gafas de sol sirven para proteger los ojos de los efectos nocivos del sol. De hecho, algunos dolores de cabeza, conjuntivitis y fotofobias están producidos directamente por la utilización de gafas que no disponen de los filtros adecuados para evitar el paso de la radiación ultravioleta.

Lo más apropiado es adquirir unas gafas homologadas, de acuerdo a la normativa europea (han de llevar el sello de la Comunidad Europea CE), y que reduzcan entre 100% de la radiacción UVA, y entre el 75-90% de la radiacción visible, para evitar incomodidades y reflejos excesivos.